ESTRATEGIAS PARA LA VUELTA AL TRABAJO DESPUÉS DE LAS VACACIONES
Regresar al trabajo, después de la merecida tregua vacacional, puede suponer para algunas personas una importante fuente de estrés y ansiedad que cursa con una amplia variedad de síntomas físicos y psicológicos. Un estado de ánimo bajo presidido por la desgana, cierta inestabilidad emocional con escasa resistencia a la frustración, anticipación de lo negativo, irritabilidad, dificultad de concentración, nerviosismo y algunas dolencias orgánicas leves serán parte de la sintomatología que puede manifestarse durante este proceso de adaptación. Su duración se estima en torno a dos semanas. Los expertos recomiendan una cierta progresión a la hora de retomar nuestras rutinas laborales y evitar realizar la "inmersión" de golpe. Con la finalidad de suavizar el impacto, te proponemos siete estrategias que lograrán hacerte este trecho mucho más fácil:
UTILIZA UN LENGUAJE POSITIVO CUANDO HABLES CONTIGO MISMO:
Concédete un margen. El lenguaje crea realidades y, dependiendo de cómo nos hablamos a nosotros mismos y de cómo describimos lo que nos rodea, los retos a alcanzar nos parecerán más asequibles y manejables.
SIGUE COMPARTIENDO INSTANTES MEMORABLES CON TUS SERES QUERIDOS:
La vida es aquí y ahora. Cualquier momento es susceptible de convertirse en mágico, por breve que éste sea, si sabemos aproximarnos con la óptica adecuada: un paseo por el parque, unos refrescos en una terraza, una conversación sobre un tema interesante con los amigos o sencillamente disfrutar de tus hijos... Todo esto no acaba con las vacaciones, de hecho sólo acaba de empezar.
EVITA ANTICIPAR ACONTECIMIENTOS DE FORMA CATASTROFISTA:
La mayor parte de las personas nos pasamos media vida preocupados por cosas que nunca llegan a ocurrir. Deja que todo llegue y ya actuarás, en consecuencia, llegado el momento.
DATE ALGÚN CAPRICHO, MÍMATE:
Existe una gran diferencia entre ser egoísta y permitirnos disfrutar con las cosas que nos gustan. Aprovecha para visitar el fin de semana ese lugar que tanto te fascina, date un baño caliente o cómprate esa deliciosa fruta que es tu preferida.
ENFÓCATE EN LAS PERSONAS Y OFRECE TU LADO MÁS AMABLE:
Actúa de forma generosa y comparte con los demás tu tiempo, tu esfuerzo o lo que estimes oportuno. Te sentirás mucho mejor haciendo un bien a tus iguales y te darás cuenta de las cosas verdaderamente importantes.
APROVECHA PARA REVISAR CÓMO PUEDES MEJORAR PROFESIONALMENTE Y ORGANIZARTE MEJOR:
Gran parte de las cosas que nos agobian se relaciona con una mala planificación. Aprender a organizarnos al principio del día y encontrarnos con la mente centrada en la actividad que nos ocupa en cada momento nos ayuda a combatir el estrés y a mejorar nuestro rendimiento.
AGRADECE EL TIEMPO VIVIDO Y ESFUÉRZATE POR MANTENER UNA VISIÓN OPTIMISTA:
La mejor manera de abordar los momentos difíciles suele ser aprendiendo a relativizarlos. Apreciar todo lo que la vida tiene de bueno, entendiendo además el valor que el trabajo tiene en los tiempos que corren, nos permitirá crecer en valores y mostrarnos con una mayor sensibilidad hacia el entorno que nos rodea.
La Casa de la Psicología Positiva